El jazzman vuelve a sus raíces
El baterista y compositor Mikel Urretagoiena, pertenece a esa nueva generación de músicos vascos que se han venido perfilando como verdaderos referentes dentro de la escena jazz. Licenciado en el Conservatorio Superior de Música del País Vasco Musikene, cumplimentó sus estudios en Holanda y Nueva York para trasladarse a Madrid e iniciar allí de manera profesional su carrera, consolidando una incesante trayectoria en muy diversos proyectos. Desde los aclamados The Machetazo, Primital o Griffo, pasando por su participación en el disco de Ander Garcia Trio Amahiru, la edición de Venga Que Si junto al pianista Luismi Segurado y al contrabajista Darío Guibert en su proyecto Trezz o participando en el disco debut del contrabajista Fran Serrano, 0202. A lo largo del tiempo el baterista guipuzcoano ha colaborado con artistas de la talla de Jorge Rossy, Perico Sambeat, Mariano Díaz, Julián Maeso, Rachel Therrien, Kukai, Iztiar Yagüe o Greg Izor. Un artista cuyo recorrido se consagra con la puesta en marcha de su propio proyecto en formato de trio, actuando en numerosos festivales y clubs de jazz referentes, concretando la experiencia con la edición de este primer trabajo.
Grabado en los estudios Ona Etxea de Arratia por Josué Pascual, Denbora (Tiempo) está inspirado en el retorno a Ordizia, su localidad natal, tras un largo periplo por el mundo. Jazz contemporáneo con un definitivo aire cosmopolita y ecléctico pero fuertemente asentado en sus orígenes. Ocho temas originales escritos por Mikel Urretagoiena y una recreación de un tema del reconocido cantautor vasco, Benito Lertxundi, componen un proyecto ideado para el trio formado por el pianista y compositor guipuzcoano, Iñigo Ruíz de Gordezuela y el bajista madrileño Dani Pozo, otras dos figuras imprescindibles dentro del panorama jazz, que junto al propio Mikel Urretagoiena a la bateria, dotan a este trabajo de una sonoridad orgánica y al mismo tiempo vanguardista e innovadora, especialmente enfocada en la búsqueda de nuevas expresiones estéticas.
Denbora (Tiempo) tiene cierto aire introspectivo, con la clara intención de plasmar sentimientos y sensaciones vividos a lo largo de la trayectoria de su autor, descubriéndonos en su inicio, delicados paisajes sonoros de la mano de Iñigo Ruíz de Gordezuela al piano en Martxan (en marcha), para congratularnos con la melodía y las evoluciones instrumentales del trio en Kantu hori (Esa canción). Eclécticas y dinámicas transcurren Euri dantza (Danza de la lluvia) y Denbora (Tiempo) plenas de improvisación y polirritmias. Mikel Urretagoiena continúa pintando paisajes rítmicos en la majestuosa Tantanak (Gotas) para aventurarse en los delicados pasajes de Bidaiak (Viajes), rindiendo su particular y original tributo a Benito Lertxundi en Nere herriko neskatxa maite (La querida chica de mi pueblo). La evocadora y minimalista Gailurra (Cumbre, pico, cresta) precede a las hermosas melodías de la triunfal Bueltan (De vuelta), poniendo punto y final a este magnífico primer trabajo del baterista y compositor guipuzcoano, Mikel Urretagoiena.
Denbora es la tierra mojada, los valles, la lengua materna, el olor de los bosques. Todos los sabores y aromas que sobreviven durante la ausencia. Mikel Urretagoiena convierte el pasado en presente con una mirada nueva, experimentada y sabia, que enriquece al artista de manera exponencial cuando retorna a sus raíces.
Noticias