Música viajera e improvisación
Desde la pieza que abre el disco y escrita por Marcelo
Escrich “Contrahuellas” es un Imposible juego de contrapuntos a cargo de Javier
López Laso en el acordeón y Luis Giménez a la guitarra donde Escrich al contrabajo y Daniel
Lizárraga establecen las reglas rítmicas del mismo. Firmada por Javier López
Jaco la canción que da título a este trabajo “Aporía “se conforma desde el
contraste rítmico y la melancolía propia del acordeón en una sucesión de
melodías que acaban evolucionando en un dialogo entre acordeón y guitarra.
Escrita por Escrich “La banda y El Conjuro” transita desde claras
reminiscencias a la música popular argentina a partir de la melodía del
contrabajo y evoluciona hasta las voces del acordeón, la guitarra y el saxo
tenor de Alberto Arteta. Bajo la firma de López Jaso “Cantus” (Kantuz) con
ascendente del folklore de Euskal Herria pasea por la música francesa dando
paso a la improvisación de contrabajo, acordeón y guitarra. “Hugo vuelve a
casa” está firmada por Escrich, tributo a la memoria del poeta argentino Hugo
Guillermo Tabachnik con evidentes aires tangueros engarzados entre guitarra y acordeón para
desembocar en la voz de Gerardo Fitanovich quien recita un poema del poeta
argentino. “Nene” lleva la firma de
López Jaso inspirada en su hijo, melodía cercana a una nana que atempera la
energía rítmica de la canción para dar paso a los solos. Marcelo Escrich firma “Aldrán”
enmarcado en una introducción lenta, el tema evoluciona progresivamente
hacia la improvisación de guitarra,
contrabajo, contrapuntos en el acordeón y desarrollo de batería hasta llegar a
la outro de final lento. Donostia- Pamplona, Iruñea-San Sebastián está
escrita por Javier López Jaso e inspirada en sus viajes entre las dos ciudades.
Cierra el trabajo “Diálogos y Secuelas”
con la firma de Marcelo Escrich y la colaboración de Alberto Arteta al saxo
tenor. Final bordado