En Azkenengo Waltza, el tema que abre el disco, el batería HasierOleaga medita a propósito de Mikel Laboa, con quien llegó a trabajar de la mano de Iñaki Salvador. Piel de Gallina despega sobre el ejemplo de Jordi Bonell, En el fondo invoca a Wilco, Jeff Buckley y Radiohead en su equilibrio entre calma y tempestad, y en Stabat Mater y The Oxcart –Bydlo- adaptan sin impostaciones el universo barroco de Giovani Battista Pergolesiy el Músorgski más intuitivo, respectivamente. Todo encaja con naturalidad.
El guitarrista JorgeAbadías traza el camino a seguir, un discurso armónico hermosamente abstracto, que provee a AritzLuzuriaga y Oleaga de numerosas opciones por explorar. Gran parte del repertorio lleva su caligrafía, perfectamente definida y personal, aunque también podamos reconocer en él a Pat Metheny, DaniPérez, Neals Cline o el inevitable Kurt Rosenwinkel.
La modernidad del enfoque general no impide a Nevermind Trio tocar con un elevado swing en determinados momentos, como en la risueña El reclamo del amo, que puede incluso recordar a Blind Melon con ese groove nada impostado que lucha por imponerse a la melodía.