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Estos forajidos disfrazados cuentan ya con
tres discos, este último grabado en el estudio Pottoko de Beasain y mezclado y
masterizado por Freddi Pelaez antes de embarcarse en una gira mexicana de la
que acaban de aterrizar.
El saxo es ya parte predominante de la banda y
con él vienen a presentarnos su tercer disco ‘Akelarre’. En este peligroso ritual
disfrazado de misterio subyacen el virtuosismo,
el toque vintage, aquellas elegantes orquestas, el western, el swing, el
hard-rock de los 70, el garage y los ritmos calientes de allende los mares.
‘Lobo’. ‘La cruda’ y ‘Alimaña’ que abren la
cara A están muy cerca del patrón del surf-rock clásico y ‘Klentxas Joe’ está
empapada de blues y swing. Antes de terminar la primera cara, nos daremos de
bruces con ‘Franken surf’, pieza rotunda con musculatura rockera.
En cambio, la cara B, esconde mayor crudeza y
ritmo en sus surcos: ‘Cerdos de guerra’ empapado de garage oscuro; y ‘Fuego en
la venta’ madurado en country, hillbilly y otros sonidos americanos le dan inicio.
A continuación, podemos encontrarnos con Eddie Cochran, Rolling, Thin
Lizzy, así como con alguno de los ritmos calientes de
Vampisoul. Eso sí, antes de meternos en la olla y hacer el conjuro que nos haga
a todos bailar.
